Quiero agradecerles la amabilidad y profesionalidad con la que me han atendido todos ustedes, desde el personal que me atiende por teléfono, el comercial, como a los señores que realizaron con rapidez y precisión toda la cantidad de cajas y mobiliario. No me han puesto ningún problema y me he sentido tranquila de poder ausentarme durante parte de la mañana y por la tarde.
Es una de esas situaciones donde la profesionalidad, la amabilidad personal y su preocupación por dejar a una cliente tranquila se entrelazan de tal forma que solo cabe la admiración y un enorme agradecimiento por estar ante una persona con un sentido encomiablemente humano de su trabajo.
Ha sido un hallazgo y un placer el contar con ustedes para este trabajo.